El corazón es uno de los órganos más importantes del cuerpo humano. Si tiene antecedentes familiares de enfermedades cardíacas y/o ataques cardíacos, tiene un mayor riesgo de sufrir problemas relacionados con el corazón.
Las enfermedades del corazón pueden reducir su esperanza de vida y hacer que la vida sea un reto.
Incluso si cree que está sano, puede hacer algunos cambios para mejorar su salud cardíaca, y consultar precios de prepagas para encontrar el seguro médico que más se adapte a usted. Cuidar hoy de su corazón es la clave para vivir una vida larga, feliz y saludable.
- Deje de sentarse y empiece a hacer ejercicio
Aunque probablemente ya sepa que podría beneficiarse de un poco de ejercicio físico, es posible que se encuentre inventando una excusa tras otra para no levantarse del sofá.
No importa cuántas cosas hagas en un día normal, la cantidad de tiempo libre que tengas o incluso lo cansado que te sientas, siempre puedes encontrar tiempo para hacer un poco de ejercicio.
No dejes pasar otro día en el que te pases la noche sentado en el sofá viendo tu programa de televisión favorito. Levántate y haz algunos estiramientos básicos mientras ves un episodio, o tómate un descanso entre episodios para dar una vuelta a la manzana o subir y bajar las escaleras.
Si trabajas sentado todo el día, considera la posibilidad de conseguir un escritorio de pie o hacer descansos rápidos de 5 minutos cada hora.
El ejercicio diario puede mejorar significativamente la salud de su corazón y reducir los riesgos de desarrollar graves problemas de salud en el futuro que deban ser atendidos con seguros médicos. Así que empiece a ser más activo y buscar precios de prepagas para estar más protegido ante cualquier problema.
Las personas obesas o con sobrepeso corren más riesgo de desarrollar problemas cardíacos.
- Conviértase en un experto en higiene dental
Muchas personas no se dan cuenta de la relación que existe entre un corazón sano y una boca sana. Las personas que sufren problemas de higiene dental y afecciones dentales corren más riesgo de desarrollar otras complicaciones de salud graves que pueden incluir enfermedades cardíacas.
Cuando le faltan uno o más dientes en la boca, es susceptible de sufrir alveolos secos, que se producen cuando se forma un coágulo de sangre en la encía. Este coágulo de sangre puede desplazarse a otras partes del cuerpo y provocar un derrame cerebral.
Una higiene dental deficiente también supone un riesgo de contraer bacterias nocivas cuando se está fuera de casa. Sin embargo, una buena higiene dental implica algo más que cepillarse los dientes por la mañana.
Hay que cepillarse los dientes tres veces al día, utilizar el hilo dental entre las comidas y enjuagarse con un colutorio. Acude regularmente a tu dentista para una revisión completa cada seis meses.
- Dejar de fumar
Tras recuperarse de un infarto, el paciente recibirá una serie de instrucciones del médico sobre lo que debe hacer y lo que no. Dejar de fumar es una de las primeras cosas de esa lista.
Fumar es especialmente malo cuando se combina con un estilo de vida sedentario. Si pasas muchas horas en un escritorio, en el sofá o en cualquier posición sentada, tienes más posibilidades de sufrir un coágulo de sangre.
Mientras que algunos coágulos son inofensivos y causan poco o ningún dolor, los coágulos frecuentes le hacen correr el riesgo de sufrir un ataque al corazón o un derrame cerebral.
Muchos productos para dejar de fumar pueden ayudarle a abandonar su mal hábito. Estos productos incluyen chicles, pastillas y parches. Cada uno de ellos contiene una cantidad determinada de nicotina y le ayudan a dejarla gradualmente.
También puedes unirte a un grupo de apoyo o pedir a tus seres queridos que te ayuden a mantener el rumbo. Si fumas, asegúrate de hablar con tu médico de cabecera sobre las formas de dejar el hábito.
- Duerma más
Dependiendo de con quién y dónde trabajes, es posible que notes que la gente presume de lo poco que duerme cada noche. Algunas personas creen que es una insignia de honor dormir sólo unas pocas horas cada noche, pero esas personas no se dan cuenta del daño que hacen a sus cuerpos.
Por lo general, hay que dormir entre seis y nueve horas. Dormir menos de tres horas por noche ralentizará el tiempo de reacción de tu cuerpo y puede hacerte sentir como si estuvieras borracho. Cuanto menos duermas, más presión ejercerás sobre tu corazón. Tu cuerpo utiliza el sueño como una oportunidad para recuperarse de los retos del día.
Si te cuesta dormir, te sigues despertando después de dormir o sufres de insomnio, habla con tu médico de cabecera, si no tiene un médico de cabecera puede consultar precios de prepagas para encontrar el plan que pueda ayudarlo.
Es posible que tenga una afección llamada apnea del sueño que hace que deje de respirar, lo que obliga a su cuerpo a despertarse temporalmente en mitad de la noche.
Dormir hasta nueve horas por noche puede ayudarle a sentirse mejor y más sano, además de mejorar la salud de su corazón.